miércoles, 9 de enero de 2008

"Escépticos diferentes"

Sacado de Escépticos diferentes 24 Dic 2007

VENTANA DE OTROS OJOS // MIGUEL DELIBES DE CASTRO

* Profesor de investigación del CSIC

Algunos ingenuos, los optimistas mal informados, muchos interesados por razones diversas, niegan las evidencias del cambio climático. Aseguran que no hay unanimidad entre los científicos, que no están completamente de acuerdo. Y tienen razón. Como he argumentado otras veces, afortunadamente no hay coincidencias absolutas, y eso permite seguir aprendiendo, precisando más.

Hace unos días, en una interesante mesa redonda organizada por Pangea Consultores, tropecé con un modelo de escéptico diferente y particularmente lúcido. Roberto Bermejo es profesor de economía en la Universidad del País Vasco y duda de que el calentamiento global llegue a ser tan extremo como anticipan los modelos. “Mira que bien -podríamos pensar-, abre una ventana de esperanza”. No se hagan ilusiones. El problema es que, aunque escéptico, Bermejo no es optimista. “Los análisis de los climatólogos son correctos -señala -, pero no han tenido en cuenta que en poco tiempo no habrá suficiente gas, petróleo y carbón en el mundo como para seguir añadiendo CO2 a la atmósfera”. En otras palabras, aunque quisiéramos, no podríamos seguir utilizando combustibles fósiles, porque no los habrá.

Bermejo subraya la dificultad de conocer el estado real de las reservas de petróleo, pues hay muchos intereses y mucho secretismo alrededor. En todo caso, según él, cada vez contamos con menos reservas y es más difícil extraer el crudo existente, de manera que estamos muy cerca del techo máximo de producción. Sin embargo, la demanda no cesa de crecer, lo que explica la especulación y la subida disparatada de los precios. “Por primera vez -advierte el experto, la Agencia Internacional de la Energía ha emitido un informe, distribuido sólo a los gobiernos, donde urge a ahorrar energía de forma urgente. Entre otras medidas sugiere favorecer que varias personas compartan el mismo coche, trabajar cuatro días a la semana y hasta prohibir la circulación en determinados días”.

El escepticismo del economista Bermejo, por tanto, es de un tenor diferente al habitual. No niega el calentamiento global debido a la utilización de combustibles fósiles y a los cambios de uso del suelo, ni tampoco duda de sus efectos adversos. Pero teme que la crisis de la energía se manifieste con toda su crudeza antes, y de una forma más difícil de mitigar, que la crisis del clima. “Ahora sabemos que cada año vamos a tener menos petróleo y que también estamos cerca del techo en la disponibilidad de gas y carbón. Hemos pensado poco sobre ello. Forzosamente se generarán conflictos y las actividades económicas que requieran muchos combustibles fósiles, como el turismo, el transporte por carretera y la agricultura, disminuirán radicalmente”.

La concienciación sobre el cambio climático es muy positiva, pero su éxito mediático amenaza con dejar en sombras otros problemas con los que deberíamos contar.

2 comentarios:

Cristina dijo...

Creo que las palabras de Miguel Delibes de Castro son de lo más acertadas.
Hace unos años me leí el libro que publicó junto a su padre, "La Tierra Herida", y me gustó mucho. Es un libro en el que tratan los grandes problemas de la Tierra actuales en un lenguaje asequible para cualquier persona que no tenga ni idea de temas ambientales, os lo recomiendo si os ha gustado este artículo.

Saludos.

Roke Iñaki Oruezabal dijo...

A mi me gusta bastante el estilo de Delibes hijo, me parece un buen divulgador científico.
Se pueden leer escritos suyos (cortitos, entradas a blog) de tanto en tanto en http://blogs.publico.es/ciencias/
Nos vemos